El Palacio Gótico del Real Alcázar de Sevilla acoge hasta el próximo 9 de diciembre, de 10.00 a 19:00, la XXXV Muestra de Dulces Conventuales que destina sus beneficios a los conventos de clausura de la Archidiócesis de Sevilla. Unos 6.000 kilos de productos se encuentran a la venta en este espacio a través de 290 variedades elaborados por las religiosas de 19 conventos, siete de la capital y doce del resto de la Archidiócesis.
Como novedad, este año destaca el que las Dominicas de Madres de Dios han elaborado con motivo del 50 aniversario de la ordenación sacerdotal del arzobispo Juan José Asenjo junto a bocaditos árabes de Madre de Dios, yemas de San Leandro, pestiños y trufas de Santa Ana, bollitos de Santa Inés, mermeladas de Santa Paula, corazones de almendra de Santa Clara, bizcochos de canela de Santa Florentina, mantecados y magdalenas elaboradas por las Clarisas de Alcalá, y cocadas y pastas de las Clarisas de Morón.
Este encuentro parte de la tradición de las recetas centenarias con las que las monjas de clausura de Sevilla elaboran estos productos que se exponen con la colaboración de voluntarios. Pretenden igualmente sensibilizar a la opinión pública sobre la situación de las comunidades de origen de los 35 conventos de clausura en los que conviven 523 monjas y aprovecha la demanda de sevillanos y visitantes del monumento en una clara invitación a conocer los tornos de las congregaciones participantes.