Varios colectivos de comerciantes y vecinos del barrio de la Macarena han mostrado su oposición a la intención de la Junta de Andalucía de situar en la zona un centro para menores extranjeros no acompañados, un centro calificado como MENA.
La disconformidad de estos colectivos se centra en que la mayoría de recursos sociales se instalen en este barrio, a lo que la consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz, ha asegurado que en el centro para menores extranjeros no acompañados (MENA) que se pondrá en marcha primarán las «condiciones de seguridad, la convivencia y la disciplina absoluta».
Desde la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA) han respondido presentado una queja ante el Defensor del Menor de Andalucía y la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación por esta polémica considerando de «graves incidentes» los que se están dando en la Macarena.
«Se han realizado, por parte de algunas asociaciones, campaña para impedir la instalación del centro de acogida de menores extranjeros no acompañados y se ha señalado donde residirán los menores y su ubicación exacta», denuncian.
Asimismo, «dichas organizaciones han esgrimido la existencia de abundantes centros de acogida social en el distrito. Sin embargo son muchas las indicaciones que apuntan a estimar el rechazo a los menores migrantes como el auténtico motivo. Sin conocer a los posibles acogidos se les ha despreciado como ‘manojo de inmigrantes’, se ha advertido sobre su peligrosidad, reconociéndoles como delincuentes y se han difundido en todos los tonos las socorridas expresiones cargadas de racismo y xenofobia. Incluyendo la afirmación de llevar más delincuencia la barrio, o que el centro de acogida se pueda convertir en ‘un nido de prostitución o delincuencia, ocupas y trata de blancas'», lamenta APDHA.