El cineasta David Trueba y la escritora mexicana Brenda Navarro protagonizan el prólogo de este festival que tendrá lugar hasta el próximo día 6 en la Plaza de San Francisco
“La literatura tiene que entretener, tiene que apoderarse de ti, hechizarte, sentir el instinto primitivo de saber qué pasa a continuación”. Con esta idea ha comenzado Antonio Muñoz Molina su intervención en Hispalit, inaugurando así esta serie de encuentros que vinculan la literatura con temas diversos como el cine, el periodismo, la ilustración, la política o el feminismo. “Hay una cosa extraordinaria en encontrar lo que no se está buscando, no hay que tener miedo a perderse. Algunos de los mejores libros que he leído han sido sin buscarlos”, ha continuado Muñoz Molina, asegurando que “el abanico de lectura es tan grande que siempre se encuentran libros que enseñan cosas muy profundas”. El autor ha querido, antes de adentrarse en el oficio de escribir, acordarse también de la lectura: “Leer es una tarea que requiere tanto adiestramiento como escribir”; y también ha defendido la existencia de la literatura más allá de los géneros canónicos, recurriendo para ello al autor sevillano Manuel Chaves Nogales: “Hay una idea de jerarquía en la que una novela es superior a una crónica, pero como ocurrió con Chaves Noageles, se descubrió que la prosa que usaba para sus textos era literatura”.
En cuanto al oficio de escribir, ha reflexionado sobre la importancia que la limitación y el encargo generan en el proceso de escritura, ya que “los plazos crean gimnasia intelectual”. Respecto a las temáticas que encuentra para sus libros, ha querido compartir con el público que “una manera de aprender a escribir es aprender a contar la experiencia de tu propia vida”, sin olvidar la importancia del editor en todo este proceso: “Hay que tener la decencia profesional de saber que los textos no son sagrados y que pueden ser mejores si tienes quien te ayude. Hay una primera parte de arrebato y una posterior de mucho trabajo y corrección”, ha concluido el autor.
Muñoz Molina, que ha recibido recientemente el Premio José Luis Sampedro, es un narrador que sobresale por su calidad literaria y impecable trayectoria editorial, con un destacado equilibrio entre su independencia como escritor y su compromiso ético en novelas, ensayos y artículos periodísticos. En Nueva York fue profesor de escritura creativa, más tarde ejerció como director del Instituto Cervantes y además ocupa el sillón de la letra U, de Úbeda, su ciudad, en la Real Academia Española de la que es miembro. Entre los numerosos galardones que reconocen su trayectoria figuran el Premio Nacional de Literatura en la modalidad de Narrativa en dos ocasiones (1988) y (1992), el Premio Planeta (1991) y ha sido finalista del Man Booker Prize International (2018). Por su producción periodística ha recibido los premios González Ruano y Mariano de Cavia (2013). Entre sus novelas más icónicas figuran La noche de los tiempos, El invierno en Lisboa, El jinete polaco o Plenilunio. En septiembre de 2021 publicó el que hasta ahora es su último libro, Volver a dónde, un brillante recorrido donde se entrelazan reflexiones y recuerdos con su vivencias personales del confinamiento.
David Trueba y Brenda Navarro, prólogo de Hispalit Hispalit ha acogido en su primera jornada al cineasta David Trueba, un creador que huye de las etiquetas y que se mueve entre el mundo del cine y la literatura. En la conversación que ha mantenido con Rafael Jurado, director de la FLS, ha podido reflexionar sobre cómo se relacionan los libros y las películas en sus adaptaciones cinematográficas. David Trueba ha incidido en la importancia de ver el potencial de las historias sea cual sea su origen, tanto si proceden de una obra literaria como de una vivencia personal, pues todas las películas son adaptaciones de historias: “Da igual que adaptemos el recuerdo de nuestro primer amor o la muerte de nuestro padre, hay que adaptar e imaginar cómo se resuelve esto en el mundo cinematográfico”, ha declarado Trueba. También ha querido poner el foco en los motivos que promueven las adaptaciones literarias: “Normalmente llega el impulso económico y luego el artístico. El novelista tiende a pensar que si sale mal la culpa es del director y si sale bien es porque es una buena novela”. Para terminar, ha recalcado la importancia de “dejar volar a las novelas”.
Por su parte, la escritora mexicana Brenda Navarro ha mantenido una conversación con la poeta andaluza Carmen Camacho. Ambas han realizado un apasionante viaje por las aristas que atraviesa el oficio de la escritura en las mujeres. “¿Cuándo escribes? ¿Cómo lo haces? ¿A qué hora?”, han sido las preguntas que han servido como preámbulo para esta conversación. “El hecho de ser mujer y de escribir tiene muchas complicaciones y convergen varias conciliaciones, como la laboral, la familiar y la dedicada a la escritura”, ha planteado Carmen Camacho, para seguir recordando a una autora que confesó en una ocasión: “¿Cuándo volveré a tener la suerte de romperme un pie para poder escribir?”, ironizando sobre la excepcional coyuntura que a veces permite escribir a las mujeres. En la conversación han salido temas como la dificultad de alcanzar la concentración creativa; la búsqueda de la identidad como autora o la validez de la voz. “No me importa que mi libro no vaya a ser la Ilíada o El Quijote, pero esta es mi voz y la quiero sacar. Las editoriales y la mercadotecnia nos tienen que dejar imaginar”, ha declarado Brenda Navarro.
Hispalit seguirá los próximos días con Héctor Abad Faciolince, Jorge Volpi, Elvira Roca, Lorenzo Silva, Antonio Lucas, Nuria Labari, David Foenkinos, Lara Moreno, Darío Adanti, Laura Pérez, Isaac Rosa, Fernanda García Lao, Marta Sanz, Andres Neuman, Sara Mesa, Eduardo Ruiz Sosa, Clara Obligado, Sergio del Molino y Amparo Rubiales.