La Junta Local de Gobierno del Ayuntamiento de Sevilla ha aprobado en su reunión de hoy una convocatoria pública de subvenciones en régimen de concurrencia competitiva destinadas al rescate 36 de licencias de taxis en la ciudad, en cumplimiento del acuerdo alcanzado en julio 2016 entre el gobierno municipal y las asociaciones mayoritarias de este sector para ejecutar un plan de mejora de la calidad y competitividad del servicio público y que alcanzará este año 2020 las 140 licencias rescatadas que entonces se pactaron.
En concreto, el Consistorio destinará 2,52 millones de euros a la nueva convocatoria –la quinta desde 2016– destinada a favorecer el cese de la actividad de 36 titulares de licencias de taxis, a razón de 70.127,79 euros cada una y abonados en un único pago. Al circunscribirse a un régimen de concurrencia competitiva, las solicitudes presentadas por los profesionales del taxi serán baremadas en el seno del Instituto del Taxi hasta completar esas 36.
“Además de cumplirse todo el convenio del año 2016 para la mejora de la calidad, viabilidad y competitividad para el servicio público del taxi, esta nueva convocatoria llega en un momento en el que es más necesaria que nunca por la crisis económica y laboral derivada de la pandemia de la COVID-19, que ha reducido a mínimos la actividad local del taxi como consecuencia de las restricciones a la movilidad por el obligado confinamiento decretado por el estado de alarma y la caída del turismo. Por tanto, la iniciativa se agiliza y se incluye en la estrategia municipal para la reactivación de la economía y el empleo”, según ha argumentado el delegado de Gobernación y Fiestas Mayores, Juan Carlos Cabrera, quien ha añadido que el Ayuntamiento de Sevilla seguirá trabajando con el sector en proyectos de mejora del servicio.
“Desde 2016, el Consistorio ha desembolsado para el cumplimiento del convenio con el sector 10,5 millones, entre partidas destinadas a los 140 rescates de licencias y las dedicadas a subvenciones para compra y adaptación de vehículos al transporte de personas con movilidad reducida, los Eurotaxis”, según el balance realizado por el delegado, quien ha destacado el “esfuerzo presupuestario municipal” afrontado desde entonces.
Para beneficiarse, el taxista ha de ser titular de la licencia de taxi expedida por el Ayuntamiento o sus herederos y figurar en la lista de transmisiones en la fecha de presentación de la solicitud de rescate o pasar a la situación de suspensión de la actividad del servicio partir del momento en que se acuerde el otorgamiento de la subvención por cese y rescate y en el plazo que se determine al efecto. Asimismo, deberá comprometerse a cesar en la actividad de taxi en nombre propio, sin que pueda, en el futuro, adquirir la titularidad de una nueva licencia en la ciudad, salvo que devuelva el importe de la subvención recibida y los intereses de demora desde la fecha de abono de la misma.
Las y los profesionales del taxi deberán solicitar el rescate por escrito en el Instituto del Taxi (sito en la calle Clemente Hidalgo, 4, planta baja), en el Registro General del Ayuntamiento de Sevilla (Plaza de San Sebastián, 1), en sus Registros Auxiliares (distritos municipales) o a través de cualquiera de las formas previstas por el procedimiento administrativo común de las administraciones públicas.
En la baremación se tendrán en cuenta, y por el siguiente orden, el fallecimiento del titular de la licencia; la declaración de incapacidad permanente absoluta o total para el desempeño de la profesión habitual de taxista; la jubilación; y el tiempo de suspensión de la licencia de taxi en la ciudad de Sevilla.
Una vez obtenida, el cobro de la subvención comportará la renuncia a la titularidad de la licencia municipal de taxi, el cese en el ejercicio de la actividad de taxista en el municipio de Sevilla, dar de baja el vehículo adscrito a la licencia municipal en la Dirección General de Tráfico, sin perjuicio de mantener su uso como particular o de servicio público para otro taxista no beneficiario de subvención, y extinguir toda relación laboral con el personal contratado para la explotación del taxi.