Por Javier Compás.
Se ha iniciado este lunes 11 de Mayo en Sevilla la FASE 1 de la llamada desescalada del COVID19. A partir de este día los bares podrán abrir sus terrazas en un 50% de su aforo permitido. Y el primer día ya ha surgido la polémica. La popular cervecería Bar Jota de la calle Luis Montoto, ha sido denunciada por la Policía Local por la gente que había en la acera, fuera del establecimiento, de pie y consumiendo bebidas sin guardar la distancia de seguridad.
La noticia ha corrido como la pólvora y, en principio, ha habido informaciones confusas, se habló en principio de una multa de más de 5.000 euros para el bar, lo que llevaría aparejado incluso el cierre por sanción de cinco meses, y también se ha dicho que cada cliente que estaba consumiendo cuando llegó la Policía Local, sería sancionado con 250 euros, esta última medida ha sido desmentida en el Twitter de Emergencias Sevilla, donde, a pesar de reconocer que efectivamente, como muestran las imágenes tomadas in situ, había un gran número de personas incumpliendo las normas, no han sido denunciadas.
Por su parte la empresa ha emitido un comunicado oficial, donde alega que se han visto sorprendidos por la avalancha de clientes que se han presentado en su local al abrir este lunes y que, tras la visita de la Policía Local, esta les ha sugerido “ciertos cambios” para que la gente allí presente guardara la distancia de seguridad. La empresa, textualmente dice en el comunicado que “ante la imposibilidad de mantener la seguridad de nuestros clientes y teniendo en cuenta los cambios sugeridos y adaptaciones posibles, hemos decidido cerrar mientras ejecutamos dichas medidas”.
El comunicado del Bar Jota finaliza diciendo que “esto es una situación nueva para todos y es cuestión (según ellos) de prueba error”, al parecer sin tener en cuenta la clara normativa para esta fase sobre la continuidad del cierre del interior de los bares y de la ocupación solo del 50% del aforo permitido en las terrazas, con dos metros de separación entre mesas.