Actualmente, las calles de la ciudad albergan unos 50.000 naranjos y la previsión de la campaña de recogida de naranjas este año es de 5,7 millones de kilos, tras un aumento del rendimiento del 37,5% con respecto a la campaña pasada (2019-2020)
Emasesa tiene en marcha un proyecto piloto para la generación de energía limpia gracias al zumo de las naranjas amargas procedentes de las calles de la ciudad.
En este proyecto piloto se utiliza parte de la producción de naranjas amargas, a las que se les extrae el zumo para la generación de energía eléctrica a través de biogás para el autoabastecimiento de las instalaciones del EDAR Copero de Emasesa.
Con 1.000 kilos de este producto se produce el equivalente al consumo de cinco viviendas en un día.
De la naranja se extrae un 50% de zumo y un 50% de cáscara, aproximadamente, y por cada tonelada de naranja se generan aproximadamente 500 litros de zumo y 500 kilos de cáscara. Las cáscaras y la parte que no se puede aprovechar se lleva a una máquina de compostaje para su transformación en abono que es reutilizado en los campos de la provincia.
El objetivo es el aprovechamiento en el futuro de toda la producción de naranja amarga de la ciudad para la generación de energía limpia.
Emasesa tiene en marcha distintos proyectos de inversión en la EDAR Copero con el objetivo de que sea un centro ambiental de referencia a nivel nacional. Gracias al aprovechamiento de residuos orgánicos, se generó en las estaciones depuradoras de Emasesa en 2020 la energía para autoabastecerse equivalente al consumo anual de casi 5.800 viviendas.