La XXI Bienal de Flamenco ha presentado en la mañana de hoy una programación de 51 espectáculos que volverán a situar a Sevilla como capital mundial del flamenco. El Ayuntamiento de Sevilla, con la colaboración de otras administraciones como la Diputación Provincial y la Junta de Andalucía, refuerza así este año su compromiso con el flamenco y con el sector de la cultura como pieza fundamental para lograr la reactivación social y económica de la ciudad. La Bienal de Flamenco contará con 51 espectáculos que se desarrollarán principalmente en el mes de septiembre pero que, por primera vez y dentro de las necesidades de adaptación a las circunstancias sociales y económicas tras la crisis sanitaria, contará también con un ciclo de espectáculos durante los fines de semana del mes de agosto al aire libre en el Monasterio de San Jerónimo.
Más del 80% de los espectáculos serán estrenos absolutos y tendrán como escenarios inmuebles de valor patrimonial donde se puedan cumplir las medidas sanitarias, así como espacios abiertos. Los escenarios elegidos, además del Monasterio de San Jerónimo son: Teatro Lope de Vega, Teatro Central, Real Alcázar, iglesia San Luis de los Franceses, Pabellón de Marruecos (sede de la Fundación Tres Culturas) y Monasterio de la Cartuja (sede del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo, de la Universidad Internacional de Andalucía y del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico). Todos ellos con aforos adaptados y con posibilidad de cumplir todas las medidas de seguridad.
El director de la Bienal de Flamenco, Antonio Zoido, fue el encargado de detallar una programación que vuelve a reunir artistas de primer nivel en las tres disciplinas del flamenco como José Valencia, Farruquito, El Pele, Antonio Canales, Inés Bacán, Dorantes, Tomás de Perrate, Rocío Molina, Israel Galván, Andrés Marín, la Tremendita o Patricia Guerrero. Además de contar con la savia más nueva del flamenco como María Terremoto, El Granaíno, David Coria y David Lagos o Andrés Barrios.
En esta XXI edición de la Bienal de Flamenco el ciclo que estaba previsto para el Teatro Alameda en septiembre se adelanta al mes de agosto. Será una programación que ocupará los viernes y sábados. Para ella, se ha elegido el Monasterio de San Jerónimo de Buenavista, enclavado en el barrio de San Jerónimo. La Bienal lo rescata como ya lo hiciera en las primeras ediciones para ser enclave escénico excepcional, ahora, en las noches de verano.
El Monasterio acogerá el flamenco más experimental en el que trabajan un buen número de músicos jóvenes que ligan a este arte las propuestas más vanguardistas en espectáculos sonoros y visuales.