El análisis realizado por la Unidades de Violencia sobre laMujer de las Subdelegaciones del Gobierno ha registrado un repunte significativo de las altas en el número de denuncias registradas en este sistema VioGén en la segunda quincena de mayo, cuando ascienden a 11,47 altas diarias, 2,93 puntos por encima de la media de la primera quincena, como ha confirmado el subdelegado del Gobierno en Sevilla, Carlos Toscano a partir de la estadística elaborada por estas unidades.

Desde principios del mes de abril, coincidiendo con las prórrogas del estado de alarma y del confinamiento, se registra una tenencia al alta en el número de altas diarias en este sistema, que integra toda la información de interés para las víctimas de la violencia de género para hacer una predicción del riesgo y realizar el seguimiento y la protección a las víctimas en todo el territorio nacional.

Exceptuando la segunda quincena de marzo, precisamente cuando se decreta el estado de alarma, en la que se registra una media de 3,38 altas diarias, la tendencia ha sido alcista, con una media de 4,85 denuncias en la primera quincena de abril; 7,00 en la segunda; 8,64 en la primera quincena de mayo; y 11,47 en la segunda de mayo.Según ha explicado el subdelegado, en los 15 días de marzo se experimentó una bajada considerable “fruto de la incertidumbre de aquellas mujeres que no sabían cómo poner de manifiesto su situación, que no podían o desconocían cómo denunciar y pedir ayuda”.

A partir de este momento, se observa la incidencia del confinamiento, de ahí que en el marco del Plan de Contingencia elaborado por el Gobierno, declarara servici oesencial todos los servicios de asistencia integral a las víctimas de violencia contra las mujeres. Esta medida implica que los operadores de los servicios esenciales deban garantizar el normal funcionamiento de los dispositivos de información 24h; la respuesta de emergencia y acogida a las víctimas en situación de riesgo, incluidas las mujeres que precisan abandonar el domicilio para garantizar su protección; el normal funcionamiento de los centros de emergencia, acogida, pisos tutelados, y alojamientos seguros para víctimas de explotación sexual y trata; y la asistenciapsicológica, jurídica y social a las víctimas de manera no presencial (telefónica o porotros canales).